Enlaces a recursos sobre el AÑO LITÚRGICO en educarconjesus

LA AMISTAD. "Quien ha encontrado un amigo" (hermana Glenda)


Gracias Señor por todas las personas que a lo largo de mi vida, me han llevado hasta ti.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y yo te he encontrado a ti.
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y tú me has encontrado a mi.

Y por un tesoro he encontrado en un campo,
se vende todo para comprarlo.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y por un tesoro he encontrado en un campo,
se vende todo para comprarlo.

Yo contigo aprendí a vender mis egoísmos,
Yo contigo aprendí a no pensar en mi mismo.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y yo te he encontrado a ti.
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y tú me has encontrado a mi.

Yo por ti encontré a Dios en mi vida,
Tú eres el mayor si no de su amor,
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Yo encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Jesús por ti
Gracias Señor por todas las personas que a lo largo de mi vida, me han llevado hasta ti.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y yo te he encontrado a ti.
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y tú me has encontrado a mi.

Y por un tesoro he encontrado en un campo,
se vende todo para comprarlo.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y por un tesoro he encontrado en un campo,
se vende todo para comprarlo.

Yo contigo aprendí a vender mis egoísmos,
Yo contigo aprendí a no pensar en mi mismo.

Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y yo te he encontrado a ti.
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Y tú me has encontrado a mi.

Yo por ti encontré a Dios en mi vida,
Tú eres el mayor si no de su amor,
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Yo encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Dios por ti
Quien ha encontrado a un amigo, ha encontrado un tesoro.
Encontré a Jesús por ti.

San Blas. Fiesta 3 de febrero

Patrón de: Enfermedades de la garganta y laringólogos (+316)
San Blas fue médico y obispo de Sebaste, Armenia. Hizo vida eremítica en una cueva del Monte Argeus.
San Blas era conocido por su don de curación milagrosa. Salvó la vida de un niño que se ahogaba al trabársele en la garganta una espina de pescado. Este es el origen de la costumbre de bendecir las gargantas el día de su fiesta.

Cuando la persecución de Agrícola, gobernador de Cappadocia, contra los cristianos llegó a Sebaste, sus cazadores fueron a buscar animales para los juegos de la arena en el bosque de Argeus y encontraron muchos de ellos esperando fuera de la cueva de San Blas. Allí encontraron a San Blas en oración y lo arrestaron. Agrícola trató sin éxito de hacerle apostatar. En la prisión, San Blas sanó a algunos prisioneros. Finalmente fue echado a un lago. San Blas, parado en la superficie, invitaba a sus perseguidores a caminar sobre las aguas y así demostrar el poder de sus dioses. Pero se ahogaron. Cuando volvió a tierra fue torturado y decapitado en el año 316.

El culto de San Blas se extendió prontamente por toda la Iglesia. En el Oriente se celebra su fiesta desde muy antiguo con culto solemne el 11 de febrero. En Constantinopla había un templo dedicado a San Blas. En Armenia existió la Orden Militar de San Blas. El culto de San Blas es también muy antiguo en Occidente. Según el cardenal Schuster, en la Edad Media se erigieron en Roma no menos de 35 iglesias en honor de San Blas. Una de ellas llegó a ser contada entre las 24 abadías privilegiadas de Roma.

En España y, en especial, en la zona norte más montañosa, se abrió paso un refrán que con los años sería referente meteorológico para la gente. "Por San Blas, la cigüeña verás y si no la vieres, año de nieves".

Presentación del Señor (2 febrero). Historia

Tiene por objeto conmemorar la emocionante escena que tuvo lugar en el templo de Jerusalén a los cuarenta días del nacimiento de Jesús, según el evangelio de San Lucas (2,22-38). A esta fiesta se le llamó de la Purificación de María, recordando la prescripción de Moisés, que leemos tanto en el libro del Éxodo (Ex 13,1-12) como en el Levítico (Lev 12, 1-8). Esta fiesta comenzó a celebrarse en la misma Jerusalén hacia el siglo IV. Poco a poco fue extendiéndose a otras regiones orientales, y en el año 512 el emperador Justiniano ordenó su celebración en todo el imperio griego, ya con carácter mariano. En Occidente: consta que bajo el papa Sergio I (687-701) se celebraba ya. En el siglo VIII se extendió por varios lugares de España, Francia y Alemania, hasta hacerse universal. La bendición de las candelas no aparece documentalmente hasta el siglo x.
Con la reforma del Concilio Vaticano II se le cambió de nombre, poniendo al centro del acontecimiento al Niño Dios, que es presentado al Templo. Naturalmente, con el cambio del nombre no se quiso borrar la presencia de María. El texto evangélico de San Lucas arriba aludido funde dos prescripciones legales distintas que se refieren a la purificación de la Madre y a la consagración del primogénito.
La presencia profética de Simeón y Ana es ejemplo de vida consagrada a Dios y de anuncio del misterio de salvación.

La bendición de las velas es un símbolo de la luz de Cristo que los asistentes se llevan consigo. Prender estas velas o veladoras en algunos momentos particulares de la vida, no tiene que interpretarse como un fenómeno mágico, sino como un ponerse simbólicamente ante la luz de Cristo que vence al pecado y a la muerte

Presentación del Señor (2 febrero). Colorear escena